La denuncia es un deber, ya que toda persona que presencia la comisión de un delito está obligado a denunciar los hechos. En cambio, la querella es un derecho para el ofendido por un delito.
- La denuncia puede presentarse ante la Policía o Guardia Civil, sin necesidad de abogado. En cambio, la querella debe presentarse ante el Juzgado de Instrucción competente y se requiere necesariamente de Abogado y Procurador.
- Con la denuncia, el denunciante no se persona en el procedimiento penal. En cambio, con la querella, el querellante se constituye como parte en el procedimiento penal.